¡Maldita corrupción!

 No cabe duda, es urgente que nuestros legisladores hagan reformas a las leyes para que gente corrupta no evada la acción de la justicia. Asimismo que quienes sean impartidores de la misma tengan la preparación adecuada para poder ocupar cargos donde sea tenga que ser un juzgador, pero que quienes se encarguen de hacer llegar pruebas para incriminar a alguien ante un juez, sea una persona profesional y no mercaderes de la justicia y de la ley como existen en este momento. ¿Por qué decimos lo anterior? Nada más y nada menos porque nos hemos enterado de que algunos ex alcaldes simplemente no pueden ser castigados porque las denuncias en su contra se presentaron fuera de tiempo. Esto solo quiere decir que hubo gente que encubrió esas anomalías y por lo tanto son responsables de haber ayudado a esa gente dándole elementos jurídicos para poder evadir la acción de la justicia. Si bien es cierto que a lo mejor no podrán ser castigados por errores humanos, también es cierto que el estigma de corruptos, por no haber cumplido con la que establece la ley, lo llevarán de por vida y aunque puedan ocupar otros cargos, la gente honesta, responsable, y que en verdad ama la democracia y lucha por una política de justicia social igualitaria, siempre se lo estará señalando. Es inadmisible que por cuestiones netamente jurídicas, los corruptos ex alcaldes no puedan ser castigados. Ah, pero solo a quienes pertenecen a la élite del poder no les podrán hacer nada, aun y con el amparo interpuesto por el titular de la AGE ante la justicia federal, porque a quienes son ex alcaldes del montón y no ocupan cargos públicos importantes, esos que se chinguen. ¡Qué poca jefa! En fin, por eso mientras no haya reformas a las leyes, las cosas seguirán igual. Se debe pugnar porque existan leyes donde no importe el tiempo que pase, pero si a alguien le descubren actos de corrupción cuando haya ocupado un cargo público, que se le castigue. Y en el caso concreto que nos ocupa respecto al asunto de que por negligencia no se podrá castigar a esos ex alcaldes corruptos, las autoridades correspondientes deben llevar a cabo de todas formas las investigaciones pertinentes y fincar responsabilidades a quienes no presentaron en tiempo y forma las denuncias correspondientes, porque de que hay culpables, eso que ni qué. Hasta ahí por el momento con ese asunto, pero seguiremos atentos al desarrollo de este tema en concreto, porque hay mucho de qué hablar. Pasándonos a otro asunto, queremos felicitar ampliamente a Sarahí Estrada Cruz -mi sobrina-, por haber culminado sus estudios de nivel primario en la Escuela 20 de Noviembre, cuya clausura se llevó a cabo el día de ayer, y dice estar bien puesta para empezar su educación secundaria, prometiendo echarle muchas ganas. ¡Felicidades sobrina! En la gráfica con sus padres Macedonio Estrada Ortiz, su mamá Mariana Cruz y su hermanito Ángel. Por hoy es todo, mañana será otro día. ¡Hasta la próxima y salud!